Por: Kevin Barbosa
Lastimosamente nuestro país siempre ha estado relacionado con sucesos bélicos y hechos violentos que hasta el día de hoy no cesan y, al parecer no van a cesar durante un largo periodo de tiempo. El conflicto armado, el crimen organizado, la delincuencia común, los ajustes de cuentas, los crímenes pasionales, etc. Son en Colombia las principales causas de muertes violentas y hechos lamentables que encabezan las portadas de los titulares, los cuales en su mayoría comunican que son victimas inocentes quienes desafortunadamente resultan perjudicadas por estos flagelos que son cotidianos en la sociedad colombiana.
Aunque las leyes están hechas y los funcionarios judiciales ejercen su labor día a día, el ciudadano colombiano innegablemente se siente inseguro y teme por su integridad y por su vida. Los niveles de inseguridad van en aumento y la sensación de que el victimario cada vez tiene mayor ventaja sobre su victima es irrefutable en un país donde la mayoría de veces prima la impunidad y la falta de garantías a las víctimas.
Debido a esto ha surgido una polémica propuesta en redes sociales, apoyada incluso por algunos sectores políticos, la cual busca legalizar y flexibilizar el porte de armas en Colombia. Aunque en nuestro país el portar un arma de fuego ya es legal para algunos civiles, aquellos quienes cumplen ciertos requisitos (bastante estrictos, por cierto) es complicado hacerse con un arma de forma legal, debido al complicado proceso que esto implica, y los altos costos a los que están sujetas las armas de fuego en Colombia a diferencia de otros países.
Quienes defienden dicha propuesta argumentan que, así como los delincuentes andan armados y amedrantan a la ciudadanía, las personas que realmente no representan ningún peligro para la sociedad deberían de tener más fácil acceso a un arma de fuego para proteger su vida, su integridad y la de los suyos. Por tanto, el flexibilizar el porte de armas en Colombia es a día de hoy una de las más polémicas propuesta que ha tomado fuerza últimamente y sorprendentemente tiene un gran apoyo por un alto numero de personas quienes afirman estar cansados de la delincuencia y del sentirse indefendidos ante el crimen y que una de las soluciones ante esto es el permitir el porte de armas para civiles.
Sin duda alguna este será un tema de debate y de estudio que cada día tomará más relevancia en la sociedad colombiana y en los interesados de que este proyecto se lleve a cabo.
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