Elaborada por: Juan Diego Chávez
Querido lector, he decidido cambiar el esquema de nuestras columnas habituales debido a una problemática “sí así se puede llamar” que, aunque creamos distante de nuestra situación está más cerca de lo que pensamos, es migrar. Pues migrar no corresponde simplemente a desplazarse de ciudad o de país incluso de continente, migrar corresponde a dejar un vacío para nuestros seres queridos y un pedazo de nuestra esencia con aquello que abandonamos ya sea por voluntad propia o por ser obligados, querido lector, deseo aprecia esta lectura y pueda darse cuenta de lo que representa tener que dejar todo expectativa de algo que posiblemente funcione o posiblemente no lo haga pero qué es nuestra única salida independientemente de la situación que vivamos, en lo personal ha sido muy doloroso ver partir a mis seres queridos e incluso a los no tan cercanos pues conforman cada parte de mi entorno, de mi mundo y de mí. Es sentir por medio de ellos como se quebranta su voz al contar sus historias, historias y relatos que me llegan al corazón y que pueden conmover hasta la persona más fuerte pues estas historias interpretan a una madre viendo partir su hijo, a un padre dejando atrás a sus hijos por un mejor bienestar, a unos hijos sollozando por la partida de su padre y a un hermano deseando lo mejor para su prójimo.
Sin más que decir querido lector y con estas breves pero reales palabras no puedo decir más qué buena suerte si es un migrante o un cálido abrazo de ser el familiar de uno a él que le haga mucha falta.
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